Una situación insoportable en mi matrimonio

Cada día tomamos decisiones y esas decisiones van teniendo consecuencias, algunas más fuertes otras pueden ser no tan fuertes o grandes. Pero las situaciones que existen en nuestras familias, nosotros mismos las hemos formado, los monstrous enemigos de la familia somos nosotros mismos quienes los hemos invitado a ser parte de nuestro diario vivir.  Los enemigos más comunes son, la rutina, falta de comunicación, falta de interés, depresión, falta de amor (como verbo), descuido de la relación sexual, irresponsabilidad, falta de perdón, infidelidad, incompatibilidad, egoísmo, orgullo, intolerancia, esto lo podemos aplicar a todos los matrimonios,  pero para los que estamos en este mundo, pero no somos de este mundo pues pertenecemos a un reino eterno en Cristo, los problemas que pueden llevarnos a acariciar la idea del divorcio o destruir nuestra familia son los siguientes,  Descuido del fundamento divino, Descuido de la oración como esposos, descuido de compartir tiempo juntos, descuido de la comunicación, descuido de invitar a Cristo a ser parte de nuestro matrimonio. 

¿Ya no hay remedio?        

Si usted piensa que ya no hay remedio, es una decisión que usted tomó, no es una realidad, solo una decisión.  Si ambos están vivos y ambos tienen el deseo de seguir viviendo, puede haber todavía un rayito de luz, que puede encender una llama grande de amor y pasión. Juntos pueden unirse en oración y buscar la ayuda de Dios para seguir adelante.

Sin duda hay muchas razones por las cuales ya no se quiere seguir con el matrimonio, pero,,,,  ¿cuantas en realidad y siendo muy sinceros juntos pueden decir que son verdaderamente validas? 

si analizamos detalladamente la familia, el tiempo vivido y la experiencia unidos como matrimonio, encontraremos que hay muchas más razones para seguir adelante, comparándolas con las razones para destruir la familia. 

Analicen juntos y verán que hay muchos más motivos para seguir adelante como matrimonio y los que están apuntando para deshacer el matrimonio son de pronto solo enemigos que Satanás a puesto en la familia para destruirla.  Pues si hay dos instituciones divinas desde la creación que el diablo odia, son, la Santidad de la Familia y el Santo Sabado. 

  • Filipenses 2:4-5 No busquéis vuestro propio provecho, sino el de los demás. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús:

Lucha por tu matrimonio, lucha por tu familia, pues después de Dios, tu familia es lo más importante y lo más grande que tienes en tu vida. 

Joel Medina   Capellán y Evangelista

Mandamiento Número Nueve, No Mentirás

Éxodo 20:16 No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.

Entramos así al mandamiento número 9,

Testimonio o testificar es lo mismo que una declaración, no debemos declarar falsamente contra nuestros prójimos, sean conocidos, familiares o hermanos en la fe. Una declaración puede ser en la corte, o entre conversaciones,  para proteger o hacer daño a otra persona.

Otra forma de ver este mandamiento es la mentira, no debemos mentir a nuestro prójimo o en contra de nuestro prójimo, lo tenemos  estrictamente prohibido por Dios.  Y ¿Que tal de las mentirillas blancas? La palabra de Dios no les ha puesto color, somos nosotros los humanos que le hemos puesto tanto color como tamaño, pero la mentira es mentira.  Claro, debemos dejar que sea Dios quien juzgue a una persona que ha mentido, aunque se le llame, mentira blanca.  ¿Y que es una mentira blanca?  Normalmente se conoce como una mentira que ayuda a proteger a una tercera persona, o en algunos casos a la misma persona a quien se le ha mentido.  Y normalmente a una mentira blanca, no se le ve como una mentira mala.

Dice un dicho, “la verdad no peca pero incomoda”.

Es en estos casos en que algunas veces las personas prefieren mentir, que incomodar a las personas.  Y en muchos de estos casos, por cierto, se hace más daño al mentir, que a verles incomodado con la verdad.

Tal vez podríamos decir que es mejor incomodar a una persona con la verdad, que hacerle daño con la mentira.  Por lo menos en este caso tendríamos la aprobación de Dios.

 

Éxodo 23:7 dice:  De palabra de mentira te alejarás, y no matarás al inocente y justo; porque yo no justificaré al impío.

 

No debemos olvidar que la mentira es un pecado, igual que el robar, adulterar, tener otros dioses, adorar imágenes o transgredir el Sábado.

 

Y eso nos lleva al siguiente punto, pues hemos analizado a la mentira en derredor de nuestros prójimos, y,,, ¿Que piensa usted de mentirle a Dios?  Creó que estaríamos de acuerdo en que sería lo peor que podemos hacer, sabiendo que eso nos alejaría de su presencia más y más.

 

Isaías 59:12-14 dice:  Porque nuestras rebeliones se han multiplicado delante de ti, y nuestros pecados han atestiguado contra nosotros; porque con nosotros están nuestras iniquidades, y conocemos nuestros pecados:

13 el prevaricar y mentir contra Jehová, y el apartarse de en pos de nuestro Dios; el hablar calumnia y rebelión, concebir y proferir de corazón palabras de mentira.

14 Y el derecho se retiró, y la justicia se puso lejos; porque la verdad tropezó en la plaza, y la equidad no pudo venir.

 

Sin duda alguna mentir contra Jehová, hace más fácil poder mentir a nuestros prójimos, y eso nos destituye del cielo.

 

Sin olvidar que es un pecado mentir, pues el mandamiento dice, No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.

Analicemos los siguientes textos Bíblicos,

Salmos 12:2 Habla mentira cada uno con su prójimo; Hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón.

Dice otro dicho, “En boca de mentiroso, lo cierto se hace dudoso”

Creo que nadie confiaría en una persona que constantemente miente. Y aunque no entendamos porque,,,  hay personas que mienten solo por mentir, sin haber necesidad. Si usted conoce alguien así, le pregunto,,, ¿Cuanta confianza le tiene a esa persona? O ¿Cuanta confianza inspira esa persona?  Claro no tiene que contestar, es un punto solo para analizar.

Vea lo que la palabra de Dios dice sobre los que mienten,

Salmos 63:11 …Porque la boca de los que hablan mentira será cerrada.

 

Si de pronto usted es un hijo fiel a Dios y la primera parte de

Salmos 119:69 se cumple en usted, haga suya la última frase.

La primer parte dice:  Contra mí forjaron mentira los soberbios,

En la segunda parte leemos: Mas yo guardaré de todo corazón tus mandamientos.

Debemos mantenernos firmes ante cualquier adversidad.

Le invito a analizar los siguientes textos bíblicos y espero que se queden grabados nuestros pensamientos.

Salmos 119:29 Aparta de mí el camino de la mentira, Y en tu misericordia concédeme tu ley.

Salmos 119:163 La mentira aborrezco y abomino; Tu ley amo.

Salmos 119:104 De tus mandamientos he adquirido inteligencia; Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.

Salmos 119:128 Por eso estimé rectos todos tus mandamientos sobre todas las cosas, Y aborrecí todo camino de mentira.

Efesios 4:25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.

Proverbios 13:5 El justo aborrece la palabra de mentira; Mas el impío se hace odioso e infame.

Sin duda alguna, el que miente está desobedeciendo los mandamientos de Dios, si, la ley de Dios, la que se compone de Diez Mandamientos, y por consiguiente la persona que miente no podrá entrar al cielo,

Así lo afirma Apocalipsis 22:15 Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira.

El diablo es el padre de la mentira, y cualquiera que es mentiroso, es su hijo.

Veamos el texto Bíblico que se encuentra en Juan 8:44, dice:

Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.

El versículo 47 dice: El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios.

¿Sabia usted que la persona que guarda los mandamientos de Dios, todos los Diez Mandamientos, forman parte del remanente, ósea del pueblo fiel de Dios?

Así mostramos que escuchamos la voz de Dios y hacemos caso a su palabra.

Hablando de los 144.000,

Apocalipsis 14:4,5  dice:  Estos son los que no se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero; y en sus bocas no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de Dios.

 

Los 144.000 son parte del remanente, y

Sofonías 3:13 aclara: El remanente de Israel no hará injusticia ni dirá mentira, ni en boca de ellos se hallará lengua engañosa; porque ellos serán apacentados, y dormirán, y no habrá quien los atemorice.

¿Y quien es el remanente? Bueno permitamos que sea la Biblia misma quien nos diga, veamos que nos dice Apocalipsis 12:17; Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.

Este remanente del tiempo del fin, son los fieles hijos de Dios, y ellos guardan la ley de Dios, Según Juan 14:15, y ellos también tienen el Espíritu de Profecía, según Apocalipsis 19:10

Hablando del cielo nuevo y la tierra nueva,

Apocalipsis 21:27 dice:  No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero.

Ósea los que guardan la ley de Dios, solo ellos podrán entrar al cielo y a la tierra nueva.

La invitación que hoy te hago es para que guardes en tu corazón los mandamientos de Jehová, para no pecar contra nuestro Creador, di como el Salmista, En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.  Salmos 119:11

Recuerda,,,

No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.  Es el mandamiento de Dios.

Dios te bendiga,

Joel Medina

Le Saluda

Honra a tu padre y a tu madre

Mandamiento número cinco:     

Éxodo 20:12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.

El primer mandamiento dirigido al prójimo, y el quinto mandamiento en la santa ley de Dios.

Y su conexión es directa a la familia.

No cabe duda que en estos tiempos la familia esta sufriendo lamentablemente las consecuencias terribles del pecado.  Por doquier vemos familias con muchos problemas, y en muchos de los casos destrozadas o totalmente destruidas, al punto que pierden casas y propiedades quedando así en la calle, en algunos casos viviendo en un automóvil, y en otros casos viviendo en la calle y mendigando para poder sobrevivir. 

Es tiempo de hacer algo para rescatar a tanta familia de las garras del pecado, de las garras del enemigo de Dios, quien es el que se ha encargado en destruir y hacer sufrir a los que le obedecen. Y tu puedes hacer la diferencia.

¿Como que los que le obedecen? Bueno digamos que si no obedecemos a Dios, entonces automáticamente consiente o inconsciente obedecemos al diablo. Veamos y analicemos el mandamiento.

Honra a tu padre y a tu madre,

¿Como puede un hijo o una hija honrar a los padres?  En realidad es más sencillo de lo que nos imaginamos, y al honrarles hay una bendición departe de Dios para nosotros.

Comparto con ustedes varios pasos a seguir, para honrar a tus padres.

A) Obedeciendo: Cuando nuestros padres nos dan una orden debemos obedecer sin dudar y sin cuestionar.  Cuando nuestros padres nos prohíben algo, es simple y sencillamente que ellos saben que es mejor para nosotros, y con la experiencia que ellos tienen quieren protegernos.  Pero más importante saber es que es un mandamiento de Dios, no es una sugerencia o algo para tomar a en forma liviana.  Dios dice, Obedece a tu padre y a tu madre.   ¿Y será que siempre debemos obedecer? Si un padre ha sido abusador o desobligado con la familia, ¿debemos obedecer?   Bueno la palabra de Dios, no pone esas condiciones pues no dice, si tu padre y tu madre son buenos contigo, obedece a ellos.  De modo que Dios dice, si tu obedeces tendrás de parte mía una bendición especial, antes de entrar a esa bendición, debemos aclarar un punto, ¿en que momento un hijo no debería obedecer a sus padres? Sin duda alguna sería una orden que vaya en contra del mandamiento, pues es Dios quien está poniendo las pautas aquí, si un padre le prohíbe a su hijo o hija buscar a Dios, ¡y mire que ha pasado!, pero el mandamiento no dice así, necesitamos entender algo, quien no está con Cristo, está automáticamente en contra de Cristo, y si algún padre está en contra de Dios, ¿Como puede educar a sus hijos bajo la dirección divina? Es imposible, de modo que el padre o madre no están llevando sus ordenes o principios de acuerdo a la voluntad divina, y si es así, entonces algunas de las ordenes de ellos podrían ser desobedecidas, y de igual manera se tendría la bendición de Dios. Solo para que quede más claro el punto, si un padre o una madre ordena a su hija a prostituirse, ¿Como puede ser esto, algo que Dios apruebe?  Creo que podemos estar de acuerdo que no. 

Por otro lado tenemos al apóstol Pablo en Colosenses 3:21 que les dice esto a los padres:  Padres, no irritéis á vuestros hijos, porque no se desanimen. 

De modo que los padres también tenemos una gran responsabilidad con nuestros hijos, pues así llegamos al siguiente punto de como podemos honrar a nuestros padres y es,,, 

B) Respetando:

El respeto es algo que se ha perdido mucho en nuestra sociedad, pero una familia cristiana y fiel a Dios, siempre tendrá el respeto de unos a otros, pues es parte de ser cristianos.

Los jovenes respetarán a sus padres en todo lo que ellos an aprendido como buenos principios en el hogar.  Si los padres saben que sus hijos son fieles y tienen temor a Dios, estarán tranquilos cuando ellos salgan con sus amigos, pues saben que se portarán bien.

Los jovenes respetarán a sus padres automáticamente cuando los padres muestren respeto entre ellos mismos, departe del papá a la mamá y viceversa.

Y el respeto debe ser algo que se practique abiertamente y constantemente dentro del hogar con todos los miembros de la familia, de los padres a los hijos y los hijos a los padres, pues es incoherente exigir respeto de alguien a quien no respetamos. 

Es posible que si exiges respeto lo tengas,  pero será por miedo al castigo de las consecuencias,  pero de una cosa si hay seguridad, en el primer descuido ese respeto exigido, será votado a la basura.  Por eso no hay nada mejor que el respeto que se ha ganado, al respetar, eso mismo podría suceder en el trabajo si eres supervisor o gerente en alguna oficina o empresa, si tu te ganas el respeto de tus empleados, puedes tener la confianza que aun sin tu presencia harán su trabajo debidamente.

Lo mismo pasa en el hogar, los hijos serán fieles a las ordenes o indicaciones de unos padres que los respetan.   

Y eso trae paz y tranquilidad al hogar y a los corazones de todos los miembros de la familia, podríamos decir, con el respeto, se tiene una familia feliz.

C) Cuidado propio:  Este punto es una conjugación de la obediencia y el respeto.

Lo más triste para unos padres es que sus hijos al estar con sus amigos se porten mal, que hagan cosas que avergüenzan a la familia, como tomar licor, fumar o hacer drogas ilícitas, o bien tener relaciones sexuales antes del matrimonio, especialmente si los jovenes son menores de edad.

Hay familias destruidas por jovenes que no han sabido honrar el nombre de la familia, pues en la mayoría de los casos no miden las consecuencias de los males que sus acciones traerá a la familia, en otros casos por la falta de amor, comprensión y respeto en el hogar, aunque los jovenes saben el daño que viene con esas acciones de igual manera proceden con su mal comportamiento, y eso sucede porque ellos están buscando identificarse a sí mismos, o porque se sienten amados, comprendidos y aceptados entre sus amigos.  De pronto tal vez hemos fallado como padres.  ¿Que hacer?  Primeramente debemos buscar el consejo divino, busquemos a Dios en oración de forma individual,  busquemos a Dios en oración entre la pareja, el esposo y la esposa, y busquemos a Dios en oración como familia.  Si toda la familia se une en oración, esto mejorará inmediatamente la forma de pensar de cada miembro, y poco a poco podemos ir ganando terreno a la adversidad y reconstruyendo a una familia destrozada, y si este no es el caso de tu familia, Gloria a Dios, que haz sabido llevar un hogar donde abunda el amor de Dios y el respeto mutuo.   No te apartes de el camino de Dios, y tu familia será una familia que forme parte del pueblo que verá a Dios.    

Analicemos la ultima parte de este mandamiento;   para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.

Sin duda alguna al amar, respetar y obedecer, ósea honrando a nuestros padres, tendremos la bendición de Jehová de vivir muchos años.  Para que nuestros días se alarguen, deben haber varios factores que debemos considerar, pues lo que hoy está acortando la vida de la humanidad son enfermedades, accidentes, y asesinatos.

Si amamos, obedecemos y respetamos, seremos muy felices y por consiguiente sanos, y un corazón sano, vive muchos años.  Y como somos obedientes, nos abstendremos de todo aquello que nos haga o pueda hacer daño, actividades, alimentos o amistades.

Y ¿Cómo nos protege este mandamiento de accidentes y asesinatos?    De nuevo, si amamos, obedecemos y respetamos, Dios nos promete protección y cuidado de su parte, y si Dios está con nosotros, nada puede estar en contra de nosotros, pues recordemos que si algo malo pasa en este mundo, viene de Satanás, pero el diablo no puede tocar a un hijo fiel de Dios, a menos que Dios lo permita, y, Dios nunca permitirá que el diablo haga algo en contra nuestra que nosotros no podamos soportar.

FE y ESPERANZA

Hijos obedezcamos a nuestros padres,  hijos respetemos a nuestros padres, hijos, amemos a nuestros padres.

Padres, corresponded a vuestros hijos de la misma manera, y serán felices;

Y así podrán decir que, con Fe y Esperanza tu familia se ha preparado, para formar parte del pueblo que verá a Dios.

Que el Señor te bendiga

Joel Medina

Te saluda

La Esperanza en el matrimonio

La esperanza es la ilusión con la que todos contraemos matrimonio, regularmente es la esperanza de cada ser humano que al casarse será feliz, y abriga la esperanza que su pareja lo hará feliz.  Si, es verdad que todos queremos ser felices, pero de pronto esperamos o buscamos la felicidad de forma incorrecta, pues el egoísmo en la humanidad ha hecho que pensemos solo en noso
tros primero, y en segundo en uno mismo y tercero solo en mí.

El pensamiento típico de un joven es, -Necesito encontrar a alguien que me haga feliz. Con este tipo de pensamiento, ya se está empezando mal, pues el matrimonio es mucho más que buscar a alguien que nos haga feliz.

Debemos primeramente examinarnos a nosotros mismo y ver que podemos aportar o ofrecer a una relación, pues primeramente así es como lograremos la felicidad interna.

En lugar de buscar a alguien que nos haga feliz, pensemos si a la persona que he elegido para pasar el resto de mi vida a su lado, yo la puedo hacer feliz, tomando en cuenta que en un momento dado el amor llegará y por ese amor que estará en nuestras vidas, desearemos que nuestra pareja sea feliz, y como le amamos fuertemente, al ver la felicidad en esa persona especial, nosotros también seremos felices.

Con la esperanza en ambos corazones debemos despreocuparnos por el mañana y vivir el presente y unidos en un solo corazón, ser felices, sin que nada ni nadie lo impida, la felicidad no se puede comprar, solo se puede cultivar diariamente con detalles por ambas partes.  Es fácil decir, “no te preocupes por el mañana” pero cuán difícil se hace cuando llegan los problemas y debemos enfrentarlos y solucionarlos. De una cosa si podemos estar seguros, con Dios en nuestras vidas, cualquier problema puede ser más llevadero, pues la invitación de Dios es que en Él depositemos nuestras cargas.

Echa sobre Jehová tu carga, y Él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo. Salmos 55:22

Y Cristo rectificó también con estas palabras: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Mateo 11:28

Cuando los problemas empañan nuestra felicidad es muy común renegar de nuestra pareja incluso de nuestra misma vida. Hay problemas que solos no podemos enfrentar, pero cuando se une el matrimonio en contra de cualquier problema todo puede ser más fácil y más llevadero, y si unidos el matrimonio ponen sus problemas en la bendita esperanza de Dios, allí sí que podremos ser felices y en muchos casos incluso aunque el problema no esté cien por ciento resuelto, pero el solo hecho de saber que Dios está al control, imana una paz y tranquilidad en nuestro ser que inmediatamente contagia a nuestro cónyuge, y así vamos logrando ser felices, día a día.

Si entregamos nuestras vidas a Cristo podremos hacer nuestras las palabras del Salmista que dicen: Cuando en mí la angustia iba en
aumento,
tu consuelo llenaba mi alma de alegría. Salmos 94:19
Recuerda que la esperanza que lleva a la felicidad está en Jehová.  Gálatas 6:7 dice: No os engañéis, Dios no puede ser burlado; porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

¿Quieres ser feliz? Hoy siembra felicidad en tus seres amados, y mañana, según la promesa Bíblica, como cosecha recibirás felicidad.

Dios te bendiga ricamente

Joel Medina

Capellán y Evangelista

Fe y Esperanza

[email protected]

Pasos para alcanzar la felicidad: LA FE

¿Que es fe? y ¿necesitamos la fe para poder ser felices?  en el término bíblico la fe se enfoca en confiar en Dios, y creo que Hebreos 11:1 es el texto más popular cuando tratamos de descifrar la fe.

Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve. Hebreos 11:1

¿Pero como la fe nos puede ayudar en nuestro matrimonio? Sin duda alguna necesitamos tener mucha fe en la persona con la que compartimos nuestra vida, la persona que no conocíamos y que tampoco era familiar nuestro hasta que se pronunció el “si” cuando se aceptaron los votos matrimoniales.  Desde ese momento se inicia una nueva etapa para una amistad que luego se convirtió en noviazgo y termino en matrimonio. Ahora unidos enfrentan al mundo entero, pero siendo individuales, y ahora él debe proteger, cuidar, amar y respetar a su esposa. Y ella, debe amar, atender, respetar y ser una ayuda idónea para su esposo. Dios no le dio al hombre una esposa para que la maltratara o pisoteara, el plan de Dios era que el hombre la amara y cuidara, de la misma manera la mujer fue dada al hombre para que lo amara y ayudara en su diario vivir, más no para que fuera su sirvienta.

Así es el plan bíblico y se requiere mucha confianza para poder ser verdaderamente felices, pues como somos individuales necesitamos confiar en nuestra pareja, allí es donde se hace presente la fe. Hoy hay mucho dolor y sufrimiento por personas que pisotean nuestra integridad, y pareciera que entre más se entrega una persona a otra, siempre sale lastimado(a), pareciera que en el mundo en que vivimos, ya no hay ese interés en mantener una relación pura, fiel y sincera.  La sociedad hace que el sexo sea un negocio, y que no hay problema si él o ella son infieles en el matrimonio, y pintan un cuadro que es solo un mirage, pues ponen una infidelidad como parte de la sociedad y pareciera que quien es infiel siempre es más feliz y es normal fallar a tu cónyuge.  La realidad de todo esto no podría estar más lejos, pues cuando despertamos de la fantasía, es entonces donde nos damos cuenta el grave error que hemos cometido, y así, se pierde regularmente para siempre la confianza de nuestra pareja, desde ese momento se termina la fe que nuestra pareja depositó en nosotros.

 

La fe o confianza, no la podemos ver, sin embargo, es algo que si podemos sentir constantemente, y Dios nos pide que tengamos fe, tanto en Él como en nuestros seres amados, pues es con la fe o confianza que hacemos sentir a las personas que nos rodean que valoramos su amistad, que valoramos la fe que han depositado en nosotros.

Recuerda que, Vivimos por fe, no por vista. 2 Corintios 5:7

Tu pareja será muy feliz si demuestras confianza en su honestidad e integridad, y puesto que tu amas a tu pareja, cuando sea feliz, también tu llegaras a ser feliz.

Aunque el siguiente versículo bíblico se refiere meramente a Dios, busca la forma de aplicarlo de una forma indirecta a tu pareja;  

En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan. Hebreos 11:6

De hecho, en el evangelio se revela la justicia que proviene de Dios, la cual es por fe de principio a fin, tal como está escrito: «El justo vivirá por la fe.» Romanos 1:17

Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo. Romanos 15:13

Si es difícil para ti, tener confianza en tu pareja, busca la ayuda profesional para poder lograrlo, pues sin confianza en tu matrimonio o tu pareja, solo acarrearas una vida sin sabores y serás cada día más desdichado(a) y te sentirás miserable por no lograr ser feliz, no olvides que es muy difícil ser feliz sin la fe o confianza en tu pareja y matrimonio, pero si lo logras podras tener un matrimonio muy feliz, largo, duradero y fuerte.

 

Dios te bendiga ricamente

Joel Medina

Capellán y Evangelista

Fe y Esperanza

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