Mandamiento número cinco:     

Éxodo 20:12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.

El primer mandamiento dirigido al prójimo, y el quinto mandamiento en la santa ley de Dios.

Y su conexión es directa a la familia.

No cabe duda que en estos tiempos la familia esta sufriendo lamentablemente las consecuencias terribles del pecado.  Por doquier vemos familias con muchos problemas, y en muchos de los casos destrozadas o totalmente destruidas, al punto que pierden casas y propiedades quedando así en la calle, en algunos casos viviendo en un automóvil, y en otros casos viviendo en la calle y mendigando para poder sobrevivir. 

Es tiempo de hacer algo para rescatar a tanta familia de las garras del pecado, de las garras del enemigo de Dios, quien es el que se ha encargado en destruir y hacer sufrir a los que le obedecen. Y tu puedes hacer la diferencia.

¿Como que los que le obedecen? Bueno digamos que si no obedecemos a Dios, entonces automáticamente consiente o inconsciente obedecemos al diablo. Veamos y analicemos el mandamiento.

Honra a tu padre y a tu madre,

¿Como puede un hijo o una hija honrar a los padres?  En realidad es más sencillo de lo que nos imaginamos, y al honrarles hay una bendición departe de Dios para nosotros.

Comparto con ustedes varios pasos a seguir, para honrar a tus padres.

A) Obedeciendo: Cuando nuestros padres nos dan una orden debemos obedecer sin dudar y sin cuestionar.  Cuando nuestros padres nos prohíben algo, es simple y sencillamente que ellos saben que es mejor para nosotros, y con la experiencia que ellos tienen quieren protegernos.  Pero más importante saber es que es un mandamiento de Dios, no es una sugerencia o algo para tomar a en forma liviana.  Dios dice, Obedece a tu padre y a tu madre.   ¿Y será que siempre debemos obedecer? Si un padre ha sido abusador o desobligado con la familia, ¿debemos obedecer?   Bueno la palabra de Dios, no pone esas condiciones pues no dice, si tu padre y tu madre son buenos contigo, obedece a ellos.  De modo que Dios dice, si tu obedeces tendrás de parte mía una bendición especial, antes de entrar a esa bendición, debemos aclarar un punto, ¿en que momento un hijo no debería obedecer a sus padres? Sin duda alguna sería una orden que vaya en contra del mandamiento, pues es Dios quien está poniendo las pautas aquí, si un padre le prohíbe a su hijo o hija buscar a Dios, ¡y mire que ha pasado!, pero el mandamiento no dice así, necesitamos entender algo, quien no está con Cristo, está automáticamente en contra de Cristo, y si algún padre está en contra de Dios, ¿Como puede educar a sus hijos bajo la dirección divina? Es imposible, de modo que el padre o madre no están llevando sus ordenes o principios de acuerdo a la voluntad divina, y si es así, entonces algunas de las ordenes de ellos podrían ser desobedecidas, y de igual manera se tendría la bendición de Dios. Solo para que quede más claro el punto, si un padre o una madre ordena a su hija a prostituirse, ¿Como puede ser esto, algo que Dios apruebe?  Creo que podemos estar de acuerdo que no. 

Por otro lado tenemos al apóstol Pablo en Colosenses 3:21 que les dice esto a los padres:  Padres, no irritéis á vuestros hijos, porque no se desanimen. 

De modo que los padres también tenemos una gran responsabilidad con nuestros hijos, pues así llegamos al siguiente punto de como podemos honrar a nuestros padres y es,,, 

B) Respetando:

El respeto es algo que se ha perdido mucho en nuestra sociedad, pero una familia cristiana y fiel a Dios, siempre tendrá el respeto de unos a otros, pues es parte de ser cristianos.

Los jovenes respetarán a sus padres en todo lo que ellos an aprendido como buenos principios en el hogar.  Si los padres saben que sus hijos son fieles y tienen temor a Dios, estarán tranquilos cuando ellos salgan con sus amigos, pues saben que se portarán bien.

Los jovenes respetarán a sus padres automáticamente cuando los padres muestren respeto entre ellos mismos, departe del papá a la mamá y viceversa.

Y el respeto debe ser algo que se practique abiertamente y constantemente dentro del hogar con todos los miembros de la familia, de los padres a los hijos y los hijos a los padres, pues es incoherente exigir respeto de alguien a quien no respetamos. 

Es posible que si exiges respeto lo tengas,  pero será por miedo al castigo de las consecuencias,  pero de una cosa si hay seguridad, en el primer descuido ese respeto exigido, será votado a la basura.  Por eso no hay nada mejor que el respeto que se ha ganado, al respetar, eso mismo podría suceder en el trabajo si eres supervisor o gerente en alguna oficina o empresa, si tu te ganas el respeto de tus empleados, puedes tener la confianza que aun sin tu presencia harán su trabajo debidamente.

Lo mismo pasa en el hogar, los hijos serán fieles a las ordenes o indicaciones de unos padres que los respetan.   

Y eso trae paz y tranquilidad al hogar y a los corazones de todos los miembros de la familia, podríamos decir, con el respeto, se tiene una familia feliz.

C) Cuidado propio:  Este punto es una conjugación de la obediencia y el respeto.

Lo más triste para unos padres es que sus hijos al estar con sus amigos se porten mal, que hagan cosas que avergüenzan a la familia, como tomar licor, fumar o hacer drogas ilícitas, o bien tener relaciones sexuales antes del matrimonio, especialmente si los jovenes son menores de edad.

Hay familias destruidas por jovenes que no han sabido honrar el nombre de la familia, pues en la mayoría de los casos no miden las consecuencias de los males que sus acciones traerá a la familia, en otros casos por la falta de amor, comprensión y respeto en el hogar, aunque los jovenes saben el daño que viene con esas acciones de igual manera proceden con su mal comportamiento, y eso sucede porque ellos están buscando identificarse a sí mismos, o porque se sienten amados, comprendidos y aceptados entre sus amigos.  De pronto tal vez hemos fallado como padres.  ¿Que hacer?  Primeramente debemos buscar el consejo divino, busquemos a Dios en oración de forma individual,  busquemos a Dios en oración entre la pareja, el esposo y la esposa, y busquemos a Dios en oración como familia.  Si toda la familia se une en oración, esto mejorará inmediatamente la forma de pensar de cada miembro, y poco a poco podemos ir ganando terreno a la adversidad y reconstruyendo a una familia destrozada, y si este no es el caso de tu familia, Gloria a Dios, que haz sabido llevar un hogar donde abunda el amor de Dios y el respeto mutuo.   No te apartes de el camino de Dios, y tu familia será una familia que forme parte del pueblo que verá a Dios.    

Analicemos la ultima parte de este mandamiento;   para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.

Sin duda alguna al amar, respetar y obedecer, ósea honrando a nuestros padres, tendremos la bendición de Jehová de vivir muchos años.  Para que nuestros días se alarguen, deben haber varios factores que debemos considerar, pues lo que hoy está acortando la vida de la humanidad son enfermedades, accidentes, y asesinatos.

Si amamos, obedecemos y respetamos, seremos muy felices y por consiguiente sanos, y un corazón sano, vive muchos años.  Y como somos obedientes, nos abstendremos de todo aquello que nos haga o pueda hacer daño, actividades, alimentos o amistades.

Y ¿Cómo nos protege este mandamiento de accidentes y asesinatos?    De nuevo, si amamos, obedecemos y respetamos, Dios nos promete protección y cuidado de su parte, y si Dios está con nosotros, nada puede estar en contra de nosotros, pues recordemos que si algo malo pasa en este mundo, viene de Satanás, pero el diablo no puede tocar a un hijo fiel de Dios, a menos que Dios lo permita, y, Dios nunca permitirá que el diablo haga algo en contra nuestra que nosotros no podamos soportar.

FE y ESPERANZA

Hijos obedezcamos a nuestros padres,  hijos respetemos a nuestros padres, hijos, amemos a nuestros padres.

Padres, corresponded a vuestros hijos de la misma manera, y serán felices;

Y así podrán decir que, con Fe y Esperanza tu familia se ha preparado, para formar parte del pueblo que verá a Dios.

Que el Señor te bendiga

Joel Medina

Te saluda

Tags:

Comments are closed